PROGRESS OVERVIEW
El Acuerdo de París fue negociado en 2015 bajo la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCCC) / (UNFCCC por sus siglas en inglés) y entró en vigor en 2016, una vez un número suficiente de países lo ratificaron. Este Acuerdo fue negociado por Gobiernos (excepto por la Unión Europea, quienes negociaron en nombre de los países europeos), cuyos países se denominan “partes”.
El Acuerdo de París marca un cambio de paradigma en la política climática internacional. Todos los países acordaron contribuir a la meta de mantener el “Promedio global de temperara por debajo de 2 OC basados en niveles pre-industriales y realizar esfuerzos para limitar el incremento de la temperatura a 1,5 OC respecto a los niveles pre-industriales”.
Los países también se comprometieron a: “Aumentar la habilidad de adaptarse a los diferentes impactos adversos del cambio climático, fomentr la resiliaencia climática y el desarrollo bajo en emisiones de gases de efecto invernadero en una manera que no amenace la producción de alimentos”. Este compromiso de todos los países es fundamental para alcanzar la meta de los 1,5 °C.
El artículo 3.1 de la Convención Marco sobre Cambio Climático, del cual el Acuerdo de París hace parte, consagra el principio de las “responsabilidades conjuntas pero diferencias (PRCD)”. Este principio reconoce que algunos países han contribuido mucho más que otros a la crisis climática. Debido a que los países más ricos del norte global contribuyeron de manera desproporcionada al problema, ellos tienen una responsabilidad histórica mayor para su solución. Esto incluye proveer apoyo financiero a países en desarrollo. Por tanto, estos países deben proveer apoyo financiero en forma de donaciones o prestamos/créditos en condiciones favorables para abordar la mitigación, la adaptación o la construcción de capacidades necesarias.
Dentro del Acuerdo de París, los sistemas de protección son claves para la participación. El siguiente documento académico brinda una mirada general de estos.
Contribuciones determinadas a nivel nacional
La contribución de cada país al cambio climático se puede encontrar en las NDC de cada país. Estas son construidas por cada uno de los países que pertenecen al Acuerdo de París y son implementadas y actualizadas cada cinco años.
En el siguiente portal puede encontrar las NDC enviadas por todos los países
Esta página web ayuda a la sociedad civil a entender los enfoques de mitigación y adaptación existentes en las NDC así como a desarrollar sus propios acercamientos. También, el grupo BID desarrolló en 2015 una revisión de compromisos con la sociedad civil en varios países de la región en el marco de la construcción de los planes nacionales de acción climática.
El Acuerdo de París deja claro que la implementación de los compromisos de las partes debe “reflejar equidad y el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas, así como las capacidades respectivas a la luz de las diferentes circunstancias nacionales”. Por eso, el Acuerdo reconoce que los países no tienen las mismas responsabilidades en las causas del cambio climático y la misma capacidad para disminuir las emisiones (mitigación) o adaptarse al cambio climático.
Así, el Acuerdo declara que países desarrollados o industrializados tienen más responsabilidades históricas en el cambio climático; por tanto, no solo deben realizar mayores reducciones en sus propias emisiones, sino que deben brindar apoyo financiero o en fortalecimiento de capacidades y tecnologías a países en desarrollo para reducir emisiones y adaptarse. El PNUMA junto con la Unión Europea abordaron estos enfoques en el documento denominado:
Este reconocimiento de las responsabilidades históricas es importante por una razón moral y una práctica. La moral tiene que ver con que la responsabilidad de abordar el cambio climático y sus consecuencias debería reposar en quienes lo han causado y en quienes más se han beneficiado de las emisiones de gases de efecto invernadero. Con respecto a la razón práctica, es importante porque, para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5°C, el mundo tendrá que llegar a emisiones cero para el 2050, mientras que, a la par, se protegen y mejoran los sumideros naturales de carbono como bosques, pantanos y manglares. Por su parte, los países en vía de desarrollo necesitan disminuir sus emisiones, alejándose del desarrollo del siglo XX caracterizado por la dependencia de los combustibles fósiles.
En síntesis, la decisión (Decisión 1 / CP.21), por la cual se adopta el Acuerdo de Paris, sugiere que las NDC de los países incluyan:
- Procesos de planificación.
- Plazos y períodos de implementación de la acción climática.
- Un punto de referencia, como un año base, para medir el progreso de las medidas.
- Supuestos o metodologías utilizadas para contabilizar las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Supuestos o metodologías utilizadas para medir los bosques y el cambio de uso del suelo.
Además de los puntos anteriores, las NDC también deben indicar cómo y por qué son”ambiciosas” y cómo promueven los objetivos de la convención climática. De igual manera, se espera que los países con recursos suficientes informen sobre las emisiones de todos los sectores de la economía. Por ahora, los países en vías de desarrollo no tienen que informar a todos los sectores, pero se espera que lo hagan a lo largo de esta década.
Uso del suelo en el Acuerdo de París
El uso del suelo en el Acuerdo de París es importante para países en vía de desarrollo. Un estudio reciente de Natural Climate Solutions encontró que eliminar la deforestación y restaurar bosques y otros ecosistemas tiene un potencial de mitigación de más de la mitad del total de emisiones en el 50 % de todos los países tropicales. El 25 % de los países encuestados tienen un potencial de mitigación mayor al total de emisiones actuales de los países en todos los sectores según el estudio. Entre tanto, pequeñas islas-Estados en vía de desarrollo son vulnerables al cambio climático.
El potencial de mitigación del sector del suelo debe cumplirse para llegar a las metas del Acuerdo de París. Los países en vía de desarrollo también deben abordar de manera apropiada las necesidades de adaptación (ver el Recuento de la Sociedad Civil). CLARA ha desarrollado un reporte detallado sobre cómo realizar esto (ver el documento denominado Reporte de Caminos perdidos).
Cero neto
Un número cada vez mayor de NDC utiliza el cero neto. Este término no aparece en el Acuerdo de París, pero se deriva del artículo 4 que pide a los países ‘lograr un equilibrio entre las emisiones antropogénicas* por las fuentes y la remoción y a bsorción por los sumideros de gases de efecto invernadero en la segunda mitad de este siglo, sobre la base de la equidad”. Es decir, la cantidad de emisiones de gases efecto invernadero (GEI) que se emite debe ser la misma que la de los GEI que se remueven de la atmosfera.
*Antropogénico significa causado por humanos. Las absorciones o remociones se refieren a todos y cada uno de los esfuerzos para eliminar el carbono de la atmósfera.
Un borrador anterior del Acuerdo de París pedía a los países que descarbonizaran completamente sus sectores de combustibles fósiles para el año 2050. Esto habría significado una verdadera reducción total de las emisiones.
Sin embargo, esa descarbonización fue rechazada por países con fuertes intereses en combustibles fósiles, respaldados por un intenso cabildeo. De allí que el artículo 4 pida un “equilibrio entre emisiones y absorciones”. A ese equilibrio se le llama lograr el cero neto.
Los miembros de CLARA están preocupados por alcanzar el cero neto pues la tarea más importante para la mitigación del cambio climático es llevar las emisiones fósiles a un cero total. Las emisiones no pueden continuar en el nivel actual, a pesar de que los países pueden verse tentados a no realizar reducciones drásticas de las emisiones confiando en el futuro “cero neto” y que se encontrarán otras formas de atrapar suficiente carbono.
Los enfoques del uso de la geoingeniería para remover y atrapar carbono son riesgosos y no han sido demostrados. La idea de que el uso continuado de combustibles fósiles puede “excusarse” a través del secuestro de carbono en el suelo creará más competencia por la tierra, hecho que causará efectos negativos en la seguridad alimentaria, los derechos y la gobernanza territorial. El artículo 4 del Acuerdo de París dice que este equilibrio debe lograrse “sobre la base de la equidad”; en esa medida, demasiados proyectos de mitigación de carbono basados en el uso del suelo generaríán una especie de “acaparamiento de tierras” que marginará a los pueblos indígenas y las comunidades locales.
Si la NDC de tu país utiliza un enfoque de “cero neto” puedes preguntar sobre lo que se propone en términos de “remociones”, cómo se hará, en dónde se llevarán a cabo, quiénes se verán afectados y si se han realizado consultas y diálogos con la comunidad.
- Nuestros socios de ActionAid + cuentan con este recurso: No cero: cómo los objetivos de “cero neto” disfrazan la inacción climática.
Una explicación también ha sido abordada por la ONG Amigos de la tierra: En busca de unicornios de carbono: el engaño de los mercados de carbono y la reducción de emisiones a “cero neto”
Más Recursos
Recursos bibliográficos
Acuerdo de París
- Acuerdo de París
- Portal NDC
- Las implicaciones del Acuerdo de París para América Latina y el Caribe
- Recuento de la sociedad civil
Guía CMNUCCC
- El Acuerdo de París y los medios de implementación: su importancia para América Latina y el Caribe
- Revisión de compromisos por la Sociedad Civil
Uso de tierras en el Acuerdo de París
- Reporte CLARA de caminos perdidos
- Cero neto: cómo los objetivos de “cero neto” disfrazan la inacción climática
- Mercados de carbono y cero neto